El reciclaje es un proceso cuyo objetivo es darles una nueva
vida a los envases, reduciendo el consumo de recursos y la degradación del
planeta o en materia prima para su posterior utilización. El reciclaje surge no
sólo para eliminar residuos, sino para hacer frente al agotamiento de los
recursos naturales del planeta.
También el reciclaje reinserta el material de descarte de
numerosas actividades industriales, empresariales o del consumo cotidiano, en
la cadena productiva, permitiendo que sea reutilizado y disminuyendo la
necesidad de adquirir o elaborar materiales nuevos.
Además, el reciclaje previene el desuso de materiales
potencialmente útiles, se reduce el consumo de nueva materia prima, además de
reducir el uso de energía, la contaminación del aire (a través de la
incineración) y del agua (a través de los vertederos), así como también
disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero en comparación con la
producción de plásticos.
El reciclaje es un componente clave en la reducción de
desechos contemporáneos y es el tercer componente de las 3R («Reducir,
Reutilizar y Reciclar»).
Los materiales reciclables son muchos, e incluyen todo el
papel y cartón, el vidrio, los metales ferrosos y no ferrosos, algunos plásticos,
telas y textiles, maderas y componentes electrónicos. En otros casos no es
posible llevar a cabo un reciclaje debido a la dificultad técnica o alto coste
del proceso, de modo que suele reutilizarse el material o los productos para
producir otros materiales y se destinan a otras finalidades, como el
aprovechamiento energético.
Así ocurre con los desechos orgánicos (restos de comida,
basura líquida, etc.), que no son reciclables, pero por suerte existen procesos
de biodegradación que llevan a cabo una actividad natural equivalente, pudiendo
ser utilizados para composting o fabricación de abono.
Proceso del reciclaje
El proceso de reciclado consta de varias etapas:
Recuperación o
recogida: esta puede ser realizada por empresas públicas o privadas.
Consiste únicamente en la recolección y transporte de los residuos hacia el
lugar donde se seguirá con el proceso. Se utilizan contenedores urbanos de
recuperación selectiva (contenedores amarillo, verde, azul, gris y marrón).
Plantas de
transferencia: se trata de una parte que no siempre se usa. Aquí es donde
mezclan los residuos para realizar transportes mayores a menor costo (usando
contenedores más grandes o compactadores más potentes).
Plantas de
clasificación (o separación): donde se clasifican los residuos y se separan
los valorizables. Residuos que sí pueden reciclarse de los que no. La fracción
que no puede reciclarse se lleva a aprovechamiento energético o a vertederos.
Reciclador final (o
planta de valoración): donde finalmente los residuos se reciclan
(papeleras, plastiqueros, etc.), se almacenan (vertederos) o se usan para
producción de energía (cementeras, biogás, etc.).
Para la separación en origen doméstico se usan contenedores
de distintos colores ubicados en entornos urbanos o rurales:
Contenedor azul (plástico): En este se deben depositar todo tipo de envases ligeros como los
envases de plásticos (botellas, tarrinas, bolsas, bandejas, etc.), de latas
(bebidas, conservas, etc.) En general, deben depositarse todos aquellos envases
comercializados en el mercado nacional e identificados por el símbolo del punto
verde.
Contenedor gris (papel y cartón): En este contenedor se deben depositar los envases de cartón (cajas, bandejas, etc.), así como los periódicos, revistas, papeles de envolver, propaganda, etc. Es preferible doblar las cajas de manera que ocupen el mínimo espacio dentro del contenedor y también retirar las grapas, los canutillos y los plásticos que vengan incorporados en el papel y cartón. Si están manchados de residuos orgánicos, como por ejemplo las servilletas de papel, no deben ir en este contenedor.
Contenedor blanco (vidrio): En este contenedor se depositan envases de vidrio. Pero se debe
tener en cuenta que no se puede depositar bombillas, frascos de medicamentos,
gafas, jarrones y tazas, loza, lunas de automóviles, porcelana o cerámica,
tapones, chapas o tapas de los propios tarros o botellas de vidrio, tubos y
fluorescentes.
Contenedor marrón
(orgánico): En él se depositan el resto de residuos que no tienen cabida en
los grupos anteriores, fundamentalmente desechos orgánicos catalogados como
materia biodegradable.
Contenedor rojo o
puntos limpios (desechos peligrosos): Como teléfonos móviles, insecticidas,
pilas o baterías, aceite comestible o aceite de vehículos, jeringas, latas de
aerosol, etc.
Contenedor naranja:
aceite de cocina usado.
Contenedor específico
en farmacias: para la recuperación de los medicamentos caducados o que ya
no se utilizarán, incluyendo los envases.
Estrategias de
tratamiento de residuos
El reciclaje, al margen de su complejo proceso de
transformación, es uno de los puntos básicos de estrategia de tratamiento de
residuos 3R.
Reducir: Consumir
sólo lo necesario, evitar la cultura de malgastar que esto solo genera más basura
de la que normalmente ya tenemos y además consume recursos cuya obtención es
costosa en términos medioambientales, como la electricidad o el agua potable.
Pequeñas acciones cotidianas pueden garantizar un ahorro importante en recursos
naturales del planeta, muchos de los cuales no son renovables ni pueden
procesarse limpiamente.
Reutilizar: Esto
nos permite utilizar materiales y productos viejos con nuevos fines,
permitiendo darles una segunda vida antes de cambiarlos inmediatamente por
otros. Así se combate la cultura del consumismo y de la irresponsabilidad, con
pequeños gestos como escribir las hojas por ambos lados, rellenar botellas de
vidrio, etc.
Reciclar: Dar
nueva vida a los materiales de desecho, como envases, papeles, latas de
aluminio, etc., reincorporándolos a la cadena productiva y a nuestras vidas. También
esto requiere de un esfuerzo ya que hay que separar la basura reciclable de la
biodegradable, así como una organización pública que distinga los lugares para
depositarlos por separado.
Importancia de reciclar
Al reciclar puede combatirse la contaminación.
Reciclar es una forma de combatir la contaminación de los
suelos y mares, ya que la presencia prolongada de basura en ellos acarrea
cambios impredecibles en sus procesos bióticos y ecológicos. De cara a la
construcción de un modelo de vida industrial sostenible en el tiempo, es decir,
que no conduzca de cabeza a la enfermedad, la extinción y el cambio climático,
el reciclaje se impone como una necesidad humana.
Por otro lado, reciclar ciertos elementos puede constituir
una actividad medianamente lucrativa, una vez que se logre implantar como parte
de la cultura cotidiana. Los elementos reciclados son comprados por las
empresas que los aprovechan para disminuir su adquisición de materia prima, de
modo que se trata de un panorama ganar-ganar.
Webgrafia
Información tomadas de:
Wikipedia
Ecoembes
Inforeciclaje
Concepto de
Imágenes tomadas de:
Simbolo reciclaje
Caneca azul
Caneca gris
Caneca marrón
Caneca blanco
Reducir-Reutilizar-Reciclar
Vídeo tomado de:
Proceso del reciclaje
Simbolo reciclaje
Caneca azul
Caneca gris
Caneca marrón
Caneca blanco
Reducir-Reutilizar-Reciclar
Vídeo tomado de:
Proceso del reciclaje
Me gustó mucho porque creo yo que esta muy bien la información. Es importante el reciclaje para no contaminar los ríos y mares; me gusta mucho las imágenes que utilizó y esta información es muy útil.
ResponderEliminarme parece muy interesante la información que nos estas proporcionando ,ya que el reciclaje es algo fundamental para cuidar nuestro planeta
ResponderEliminarMuy interesante esta información, nos sirve demasiado para poder aprender cada día mas la importancia del reciclaje
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